PRIMAN LOS HORARIOS

La primera conexión de un profesor o profesora al Centro es su horario personal, si este es bueno, es decir, si no tiene huecos entre una clase y otra, ya lo tienes predistuesto positivamente, si por el contrario no has podido contemplar sus peticiones de principios de curso, ya está negativamente incorporado y no predispuesto a cualquier cosa que se le proponga. Estoy hablando en líneas generales y tengo que mencionar los otros extremos de gente que no les importa para nada este tema y que echan más horas de la cuenta, pero desgraciadamente se dan más casos de los primeros.

Me planteo si la gente sabe valorar el horario que tenemos, si creen que sólo con dar las clases se puede llevar un centro, si no es menester echar horas de reuniones para que todo esté coordinado antes de llegar al alumnado.

Hace unos años llegaron como interinos tres personas que habían trabajado en una empresa privada, de 12 a 14 horas diarias, y cuando les dimos el horario no lo entendían, si uno terminaba un día a las 11 de la mañana preguntaba que qué hacía hasta las dos y media, les explicamos que se podía ir y que eran sus horas personales, insistía en que eso no se lo podía creer, que era imposible... En general, la gente que ha trabajado en empresas privadas valoran mucho los horarios de la pública.

Todo esto viene a hacer una reflexión con respecto al tipo de agrupamiento que hemos elegido, creo que la gente le ha dado miedo lo del agrupamiento flexible porque eso le iba a suponer condicionamientos en el horario y más tarea de coordinación, en el fondo lo que se quiere es echar las menos horas posibles. Esto hubiese supuesto que las preferencias personales que se hacen en cuanto el horario tendrían que estar coordinadas porque tendría que haber tres profes de Lengua, Matemáticas o Inglés dando clase a la vez y eso hace que haya que someter las preferencias personales, este creo que ha sido el motivo.

Creo que alguna vez la Administración pondrá un horario único para el profesorado y ya no se darán estos problemas que en realidad dificultan las tareas de los centros.