HACE UN AÑO

Hoy hace un año que a nuestra compañera, la secretaria, le dio un derrame cerebral, no se han averiguado las causas pero a mí nadie me quita de la cabeza que el estrés de estos días tuvo algo que ver, afortunadamente está muy bien y no le han quedado secuelas pero el susto fue muy gordo, así que intentemos llevarlo lo mejor posible, sin agobios y enfrentándose a los problemas con la realidad por delante, intentando solucionar lo que podamos en el horario establecido y lo que no se pueda que quede para el día siguiente. Ella misma me llamó esta mañana diciéndome que era incapaz de coger el coche que se encontraba nerviosa por lo que le pasó y que se iba a quedar en casa.

En cuanto llegué me puse a reformar la carta a las familias de bienvenida del nuevo curso y dándoles las primeras informaciones del curso para que mañana se las lleven. por cierto, tenemos la costumbre de todas las cartas que se envían a las familias informándoles de algo, ponerlas en el tablón porque hay un porcentaje de alumnos que no se la entregan a sus familias.

Aparece la administrativa con un fax de infarto, decía que dada la certificación de la matrícula de septiembre perdíamos un 2º y que le dijéramos de qué especialidad queríamos que nos quitaran un profesor. Lo leí detenidamente dos o tres veces y respiré hondo, esto no podía ser, cogí el listín de la delegación y hablé con el servicio de planificación que era el remitente. Les expliqué que éramos centro tic y que no nos cabían los 153 alumnos de 2º en 5 aulas, que aunque tuviésemos uno de más, no teníamos dónde sentarlo, que eso iba a ser un desprestigio de los centros tic y que no podía ser, después de darle todas las explicaciones me dijo que era un error y que no se tendría en cuenta. Respiré con profundidad, salí del despacho a contárselo al primero que me encontrara y me tomé un café con su correspondiente cigarro, salí fuera a dar un vistazo a la obra y me relajé un poco.

El JE llegó y se encerró con el horario, le dije que no se preocupara de claustro ni de nada, así estuvo con otro compañero hasta las tres menos cuarto, en un momento de la mañana se les fue toda la información que llevaban metida y tuvieron que volver a empezar.

Me llamó la tele del pueblo que querían hacerme una entrevista, les dije que o en ese momento o después sobre las 13 horas, porque a las 12 tenía un claustro, vinieron al momento y me hicieron una entrevista y visitamos las obras que se habían realizado este verano.

Otro café y cigarro. A las 12 empezamos el claustro donde se informó de las tutorías, el lugar de presentación y el horario de mañana. La orientadora estuvo explicando qué se podía hacer en esa hora de presentación y ultimamos algunos detalles de la jornada.

Después del claustro tuve la visita de dos familias que no estaban de acuerdo con el grupo en el que habían caido sus hijas, les tomé nota y les dije que intentaría resolverlo pero que no les garantizaba nada.

Hasta cerca de las tres estuve con papeleo.